Casa Sánchez es una vivienda con un área interna de 115.8 m². La intervención tuvo como objetivo transformar la casa en un espacio moderno, iluminado y ventilado, manteniendo su sistema estructural pero replanteando completamente su distribución interna.
Para lograrlo, se diseñó un concepto de espacio abierto que integra la sala, cocina y comedor, optimizando la fluidez y amplitud del área social. Además, se incorporó un patio trasero, permitiendo la entrada de luz natural y
ventilación hacia la habitación y la sala, mejorando así el confort interior. Como punto focal de la vivienda, se planteó un módulo de escaleras que marca el centro de la composición arquitectónica. Este elemento se recubre con amplios ventanales, generando una conexión visual con el patio trasero, donde la presencia de vegetación aporta frescura y vitalidad al ambiente.






